Con tanta vorágine de datos, se ha pasado por alto unas
medidas que pueden ser positivas, por un lado, y negativas, por otro. Me
refiero concretamente a la actualización de balances y a la limitación de
la deducción máxima del gasto por amortización:
En Sociedades, el Gobierno permitirá en 2013 la
actualización de balance para adecuarlos a la evolución de los precios. La
actualización tendrá carácter voluntario y estará sometida a una carga fiscal
del 5%. Abarcará al inmovilizado material y a los arrendamientos financieros.
El fisco espera obtener por este procedimiento 300 millones de euros.
Igualmente, Hacienda introduce de forma temporal durante los
años 2013 y 2014 la limitación de la deducibilidad fiscal de las amortizaciones
del inmovilizado material realizado por las grandes empresas. La limitación
será de un 70% del máximo previsto en las tablas de amortización. Pymes y
microempresas podrán seguir amortizando normalmente. La Agencia Tributaria
espera recaudar 2.371 millones.
La de cal:
Para los que no saben contabilidad, les diré que en una
actualización de balances para adecuarlos a la evolución de los precios
significa, a efectos prácticos, que se crea una diferencia entre el valor neto
contable de los activos sin actualizar y actualizados, esta diferencia supone un incremento de activo que se debe
compensar con un incremento del pasivo (en contabilidad el Activo siempre tiene
que ser igual al pasivo) por eso dicha diferencia se lleva siempre a una cuenta
de pasivo que se denomina "Reserva por Revalorización" o algo así.
Es sobre esa diferencia
en donde nuestro intrépido Gobierno pretende meter cucharada gravándola
en un 5% para recaudar esos 300 millones de euros que quieren recaudar de más.
Esta reservas no serán de libre disposición hasta pasados un buen números de
años (10) pero podrían ser utilizadas, si Hacienda lo permite, para compensar
pérdidas de ejercicios anteriores o para ampliar capital (lo cual es bueno para las empresas porque
incrementa su patrimonio neto) Además como tendrán activos valorados más
altamente, eso mejorará los ratios de solvencia y hará que las empresas lo
tengan mejor para solicitar créditos en las entidades bancarias (como ven esta
es la parte positiva de las medidas)
Y ahora la de arena:
Al subir el activo, también suben las amortizaciones y es
por eso que han bajado los topes máximos de amortización en un 30% o, dicho al
revés, es por eso que obligarán a aplicar un tope del 70% de la amortización
máxima permitida para cada activo
¿Qué es lo que consiguen con eso?
Pues que las empresas no se deduzcan tantos gastos en
concepto de amortización de activos y que, por tanto, no disminuya tanto la base imponible del
impuesto de sociedades (todo con el afán
de recaudar más por aplicándole el correspondiente tipo impositivo (25% al 35%)
a esa mayor base impositiva) vamos que lo que buscan es esquilmar aún más a las
maltrechas sociedades por la vía de que no puedan deducirse tanto en
amortizaciones.
Esto afectará a todas las empresas (salvo a las pymes y microempresas) a las que acudan a la
actualización de balances y a las que no, por lo que a muchas empresas les va a
perjudicar esta medida de limitar las amortizaciones Como digo, muchas no
acudirán porque no les interesa (a mayor valor del activo, mayor valor de las
acciones y los accionistas tendrían que tributar por esas plusvalías o
incrementos de patrimonio) o porque el activo en los balances ya está bien
valorados a precios de mercado (empresas de software, de equipos informáticos o
de otro tipo, empresas que operan con valores bursátiles, etc.)
Esto, en mi humilde opinión, va dirigido a las empresas
inmobiliarias o aquellas que tienen grandes activos y patrimonios
inmobiliarios, como son las empresas que tienen fábricas o grandes almacenes,
que tienen muchos pisos o ,bienes inmobiliarios de todo tipo (salvo terrenos,
que esos hoy valen poco menos que nada y no creo que nadie quiera actualizar el
valor de sus terrenos para tener un activo más pequeño que antes, incluso
podría comprometer su solvencia, como he explicado antes...:roto2:) empresas
que compraron hace muchos años y que a precios actuales, sus activos ahora
valen un dineral si lo comparamos con el valor con el que lo tienen
contabilizado (pese a la caída de los precios en el sector inmobiliaria, aún
valen más que lo que valían antes de la burbuja)
Sería otro balón de oxigeno para las maltrechas empresas
inmobiliarias, otro patadón palante, pero que esta vez no les va a salir
gratis, ya que tendrán que pagar los "peajes" antes expuestos que les
impone el gobierno, pero que sí que les servirá a las empresas inmobiliarias
para coger algo de oxigeno y para aguantar un tiempo más, a ver si cambian las
cosas en el futuro y vuelven a subir el precio de los pisitos...
Un saludo!!!
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