Contrariamente a lo que la mayoría de la gente piensa, se ha demostrado que las personas mayores de 45 años no son ningún "desecho laboral", más bien es al contrario.
Está demostrado que muchos empresarios, puestos a escoger, prefieren contratar a gente joven porque, según ellos, se adaptan mucho mejor a las nuevas circunstancias, se les puede pagar menos y exigir más (con lo que mejora el rendimiento y la productividad), además son más dúctiles, dóciles y maleables, lo que hace que sean menos conflictivos y fáciles de “domar”...
Toda una serie de ventajas que no se pueden discutir pero que hay que contrastar y contraponer con las ventajas que tiene contratar a gente más "rodada". Según los últimos estudios, los veteranos pueden aportar al negocio un mayor nivel de compromiso, menos probabilidad de absentismo laboral y buenos niveles de experiencia y conocimientos que pueden proporcionar a la empresa grandes beneficios y que demuestran, bien a las claras, que no solo es la juventud quien aporta valor a la empresa.
Para finalizar hay que tener presente que, según el Instituto de Estudios Económicos, la población española entre 45 y 55 años, ya representa casi un 20% de la población . Por tanto dicho grupo, sí o sí, está llamado a tener un papel importante en el trabajo y en el futuro devenir del mercado laboral español.
Sería un gran error prescindir de ellos y todo un lujo que no nos podemos permitir...
Un saludo!!!
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